El argentino Manuel López llegó este año a Rangers con la idea de ser el hombre gol del cuadro piducano, con su 24 años, el artillero ha tenido exitosos pasos por el fútbol de ascenso en Argentina, como Colegiales, UAI Urquiza y Flandria, último equipo que estuvo antes de recalar en el elenco talquino.
En cada club que estuvo la gente lo recuerda con cariño, y le piden que vuelva, no obstante, su presente es otro y su meta es consolidarse con Rangers para comenzar a cimentar su sueño de jugar en Europa.
Este ariete de 1.92 de estatura ya sabe lo que es gritar goles con la Rojinegra, en los cuatro partidos que disputó antes de la suspensión del Torneo Nacional de Primera B por la contingencia del Coronavirus, había convertido dos goles ante San Felipe en la primera fecha. Además, fue pieza fundamental en los tres compromisos siguientes.
En conversación con el Instagram @pasebarojassc, «Manu» dice estar solo en Talca, pero, muy contento de tener una oportunidad en Chile, un país en el que siempre quiso jugar.
«Siempre tuve ganas de venir a jugar a Chile, me hablaron muy bien de este país, he tenido compañeros como Dani Noriega que ha estado en Chile, siempre me habló bien, y otros amigos más que me dijeron que es una bonita experiencia, es un lindo fútbol, y ahora que estoy en Rangers, me siento muy contento y cada vez más adaptado».
El jugador trasandino, confesó ser hincha de Independiente de Avellaneda, y que su sueño es jugar en el fútbol europeo para llegar a la Selección Argentina, sin embargo, sabe que para estar en el cuadro Culé, lo primero que debe hacer es cumplir con sus expectativas en la tienda Rojinegra.
«Tengo varias metas en mi vida futbolística, apunto muy alto, quiero jugar en el Barcelona, y hoy siento que estoy en el Barcelona, para mí Rangers es el Barcelona, y entreno todos los días, intento mentalizarme, mejorar para llegar a Europa y a la selección. Es el cassette que dicen todos, es el sueño del pibe, una vez que uno arranca a jugar al fútbol, pero, estoy tranquilo, tengo que poner los pies sobre la tierra, y hoy dar todo por la camiseta de Rangers que es mi club».
De a poco el «Portaviones» piducano empieza a ser reconocido por el hincha talquino, al mismo tiempo, tiene claro lo que la gente quiere.
«Me lo han dicho, la gente me transmite lo que todos queremos, que es ascender, que llevemos a Rangers a Primera División, que es lo que también merece por la historia que tiene, pero, yo lo vivo con normalidad, en Argentina es muy parecido, se vive con mucha pasión, el fútbol puede alegrar la semana de una persona, así que lo vivo con tranquilidad».
Por otra parte, el futbolista de Rangers, sabía cuando llegó que el equipo está hace seis años en la Primera B, y que la dirigencia armó un plantel para subir a Primera División.
«Una vez que empezó a surgir la posibilidad, la verdad que uno empieza a investigar sobre el equipo, tuve un compañero en Flandria que jugó en Rangers, Jair Bonin, le pregunté que onda la ciudad, que onda el club, pero, obviamente uno ya sabe donde viene. Trajeron un cuerpo técnico muy trabajador que conoce la categoría y que tiene muchos ascensos, y la verdad que a uno la da orgullo que un club tan grande como Rangers te quiera para poder regresar a primera, así que lo tomé con tranquilidad, con la seriedad que merece la situación, y ahora empezar a meterle, y a pesar de que con esta paralización se cambió todo, voy a tratar de dar todo en lo personal para llevar a Rangers lo más arriba posible».
El delantero argentino marcó 11 goles en Flandria en el 2019, lo que le valió ser comprado por Antofagasta. Sin embargo, los «Pumas»decidieron cederlo por un año al cuadro piducano.