Se trató de una semana desastrosa para el fútbol chileno, los árbitros del balompié nacional decidieron irse a paro por el despido de 14 colegiados, situación que se debió al despido de Javier Castrilli, como presidente de la Comisión de árbitros.
Al respecto, Marco Antonio Sulantay, diputado de la UDI y miembro de la Comisión de Deportes de la Cámara, invitó al presidente de la ANFP, Pablo Milad, para que respondiese “ante las graves denuncias de eventuales arreglos de partidos en el pasado campeonato nacional”.