El exjugador de Independiente, Patricio Rodríguez, ha logrado el permiso para representar a Bolivia en las Eliminatorias Sudamericanas, luego de su paso por el club donde alzó la Copa Sudamericana en 2010. Actualmente, el extremo, que tiene doble nacionalidad, juega en Bolivar y es seguido de cerca por la selección boliviana. Rodríguez inició su carrera en Independiente en 2008 y rápidamente se convirtió en una promesa del fútbol argentino. Tras su paso por Jorge Wilstermann, lleva cinco años en la región y se encuentra habilitado para ser convocado a la selección. En palabras del jugador: Por ahora estoy tranquilo haciendo mi trabajo, voy de a poco. El jugador fue parte del equipo que levantó la Copa Sudamericana en 2010 y tuvo destacadas actuaciones, siendo comparado con el Kun Agüero. Luego de pasar por Santos de Brasil y tener un breve paso por Estudiantes de La Plata, Rodríguez logró dar el salto a Europa en la temporada 2016/2017 con el AEK de Atenas. En Grecia disputó competencias como la Champions League y Europa League, ganando una copa local. Posteriormente, tuvo pasos por Portugal y Wilstermann antes de llegar al Bolivar, donde ha acumulado 137 partidos en primera división con 31 goles y 30 asistencias hasta la fecha. Fuente: Olé Deporte Internacional
La odisea de la selección de Bolivia en su regreso a La Paz llegó a su final este sábado por la tarde, cuando finalmente el plantel aterrizó en el Alto, luego de una escala en Santa Cruz de la Sierras. Una llegada que se demoró 12 horas más de lo previsto, por los contratiempos que sufrió la delegación boliviana en el aeropuerto de Maturín, Venezuela, cuando se disponía a emprender su regreso luego de la derrota 2-0 ante la selección local. Al momento de abordar al avión el plantel recibió la información de que no había ningún vuelo autorizado para despegar. A su vez, argumentaron que los escáneres de la terminal no funcionaban y que además había mucho tráfico aéreo. Así, ante la imposibilidad de partir, regresaron al hotel, donde pasaron una noche antes de poder finalmente emprender la vuelta. En su llegada a La Paz, Óscar Villegas, DT de Bolivia, fue contundente con respecto a lo que tuvo que vivir la selección en Venezuela y denunció que se trató de un secuestro. “Era algo que sabíamos. Días previos sabíamos que nos iba a pasar lo mismo que a Perú. Pero ya más de ocho horas, es prácticamente un secuestro. Ya pasa a otro ámbito. Eso dicen las leyes, a partir de las ocho horas. Nos retuvieron demasiado. Pero ya está, ahora vamos a recuperarnos y a ponernos bien para el partido, aseguró, en una conferencia improvisada con la prensa local. Además, con respecto a un posible reclamo ante Conmebol , explicó: “Eso verán las autoridades correspondientes, ellas tendrán que ver qué medidas asumir”. Con respecto a las complicaciones que generó esta inesperada demora, aseguró que los jugadores descansaron lo más posible, pero dentro de lo que se puede, porque por supuesto la incomodidad... hemos ido tarde al hotel. Y para cerrar, avisó: Este tipo de cosas nos tienen que hacer más fuertes para enfrentar a Chile”. Desde un primer momento, incluso todavía en Maturín, Villegas denunció que todo lo sucedido tuvo que ver con un complot preparado por la Federación Venezolana de fútbol para perjudicar a nuestro equipo. Ellos quieren ir al Mundial a toda costa y por lo mismo necesitan que nos vaya mal ante Chile. Por eso demoraron el viaje ya que de esa forma alteraban nuestra preparación y nos quitaban horas para reacomodarnos a la altura del alto después de haber jugado a nivel del mar. Este viernes, Venezuela recibió a Bolivia en el Estadio Monumental de Maturín, por el duelo correspondiente a la fecha 15 de las Eliminatorias Sudamericanas. La Vinotinto se impuso 2-0 y se quedó con los tres puntos en casa. Pero la polémica estalló en el post partido. Al momento de abordar al avión para regresar a Bolivia, la delegación visitante recibió la información de que no había ningún vuelo autorizado para despegar (autorización necesaria desde Caracas). A su vez, argumentaron que los escáneres de la terminal no funcionaban y que además había mucho tráfico aéreo. El staff de La Verde optó por volver al hotel a pasar la noche, para partir en la mañana del sábado. Dicho suceso despertó un sinfín de suspicacias, con la principal teoría de que el escenario se trataba de un sabotaje en contra de la selección boliviana, llevando así a que los futbolistas puedan descansar menos pensando en lo pareja que está la pelea entre la Vinotinto y el conjunto boliviano por conseguir el cupo de repechaje para la Copa del Mundo 2026. “Le pedimos al ministro de Gobierno, que se supone que es un gobierno amigo, que nos faciliten salir de Venezuela. Y bueno, está sucediendo lo que teníamos previsto, en todo caso. Lo hicieron con la línea aérea venezolana con Perú, elegimos otra, pero ven que no respetan ni siquiera otra línea aérea que es del exterior”, denunció Óscar Villegas, DT de Bolivia. Mientras Harold Howard, jefe de seguridad de la FBF., manifestó: “Nos tienen secuestrados en Venezuela. Esto es un sabotaje hacia la selección boliviana. Alegan tráfico aéreo cuando apenas había dos aviones volando. No se si habrá una mala intención o qué”. Desde la Federación Boliviana afirmaron que la intención es que haya una resolución a nivel gobiernos y también Conmebol fue notificada del suceso para tomar cartas en el asunto como corresponda. Finalmente, el avión partió casi al mediodía del sábado y aterrizó cerca de las 16 horas en Santa Cruz para luego tomar otro vuelo a La Paz donde los jugadores permanecerán concentrados esperando el duelo con Chile el próximo martes. Venezuela ocupa el séptimo lugar con 18 puntos y Bolivia está en el octavo puesto con 14 puntos. Perú empató este viernes con Colombia y llegó a 11 puntos superando y dejando último a Chile con 10 puntos tras caer ante Argentina. El martes Chile podría quedar matemáticamente fuera del Repechaje. Estará obligado a ganarle a Bolivia y rezar para que Venezuela no sume en su choque contra Uruguay. Luego en septiembre le quedará jugar ante Brasil como visitante y con Uruguay en casa en el cierre de las Eliminatorias. A su vez Perú está en una situación similar con apenas un punto más que La Roja dirigida por Óscar Ibáñez quien tiene ganar todo y esperar resultados. Fuente: Olé Deporte Internacional
En un partido que significó otra derrota en los penales para River, la octava de manera consecutiva, y un triunfo histórico para Platense por 4-2 (1-1 en tiempo regular), los focos de aquellos cuartos de final del Torneo Apertura se centraron en el árbitro, Yael Falcón Pérez, por su seguidilla de errores en el cierre del partido que perjudicaron al Calamar. De hecho, no volvió a ser designado en otro encuentro hasta que este miércoles, 15 días después, la Conmebol anunció que será el juez principal de Venezuela-Bolivia, por la fecha 15 de las Eliminatorias. Falcón Pérez, uno de los dos árbitros principales argentinos que irán al Mundial de Clubes, encabezará el próximo viernes en Maturín una terna arbitral completamente albiceleste para un partido clave. A él lo acompañarán Maximiliano del Yesso como asistente 1; Facundo Rodríguez como asistente 2; Leandro Rey Hilfer como cuarto árbitro; Jorge Baliño como el encargado del VAR y Germán Delfino como AVAR. En ese encuentro, con cuatro jornadas restantes para el fin de estas Eliminatorias, Venezuela y Bolivia, distanciadas por apenas un punto, juegan un duelo trascendental en búsqueda de clasificar al Mundial 2026: la Vinotinto se encuentra séptima con 15 unidades y posee, en este momento, el cupo de repechaje, mientras que la Verde, octava con 14, se encuentra fuera de los puestos de clasificación. Un triunfo para Bolivia significará alcanzar ese cupo de repechaje y para Venezuela, en consecuencia, supondrá protegerlo y aspirar, incluso, a los puestos de clasificación directa: su rival más próximo es Colombia, que se ubica en el sexto lugar con 20 unidades. En ese marco dirigirá Falcón Pérez, cuestionado tras aquel mata-mata por los futbolistas de Platense, por ex colegas como Javier Castrilli y por el propio Fernando Rapallini, Gerente Técnico de Arbitraje de la AFA, quien, en diálogo con Olé, calificó como una muy mala conducción su trabajo en ese cruce. Las decisiones que tomó Falcón Pérez y que perjudicaron a Platense tuvieron lugar todas en el final del partido. Sobresalen no mostrarle ninguna tarjeta a Marcos Acuña, defensor de River, tras un planchazo a Fernando Juárez (merecía al menos una segunda amarilla y ser expulsado); y cobrar un lateral a favor del Millonario que era en realidad para el Calamar y que les permitió a los de Marcelo Gallardo construir la jugada que terminó en el penal (bien sancionado) con el que los locales empataron el partido. Ni siquiera el VAR llamó a Falcón Pérez para revisar el planchazo de Acuña por una posible roja directa que es, de hecho, la decisión que tendría que haber tomado el árbitro según le dijo Rapallini a Olé. Y en el lateral a favor de River, la pelota tras una disputa entre Lucas Martínez Quarta y Franco Zapiola había rebotado en el defensor del Millonario. Por lo tanto, el lateral correspondía para los de Vicente López. No lo observó eso Falcón Pérez ni tampoco el asistente 1 Yamil Bonfá ni el cuarto árbitro Sebastián Martínez. A eso hay que sumarle que todas esas situaciones se dieron en el marco de un adicional de 6’ que luego Falcón Pérez amplió a 9’. A su favor, el penal está bien cobrado y dar tanto descuento es inusual pero adecuado a lo que había pasado. Platense demoró todo lo que pudo; hubo atenciones en cancha; ceremonias antes de cada tiro libre. Cuando anuncia 6’ más hasta es poco y resulta que hay un jugador en el piso que impide reanudar hasta que pasa ya casi la mitad de esa adición; está bien que se agregaran otros 3’ aunque la costumbre ha naturalizado que se premien las demoras y que los árbitros se laven las manos. Hay también un fortísimo choque entre Franco Mastantuono con Juárez en el cual Mastantuono se ataja con el brazo hacia adelante y golpea al rival; luego Falcón Pérez sigue el partido con Juárez en el piso incluso desviándose del juego para interceder entre Mastantuono y Juárez. Sobre el jugador caído;el árbitro no vio falta en el topetazo entre Mastantuono y Juárez y pudo interpretar que el de Platense se quedaba en el suelo para estirar minutos como habían hecho muchos de sus compañeros; más aún cuando en la continuidad del juego Platense recuperó la pelota y no la tiró afuera ni le pidió atención al árbitro sino continuó el ataque que terminaría justamente en el polémico lateral. Ahí sí antes de que River repusiera la pelota hizo atender a Juárez. Fuente: Olé Deporte Internacional
El exjugador de Independiente, Patricio Rodríguez, ha logrado el permiso para representar a Bolivia en las Eliminatorias Sudamericanas, luego de su paso por el club donde alzó la Copa Sudamericana en 2010. Actualmente, el extremo, que tiene doble nacionalidad, juega en Bolivar y es seguido de cerca por la selección boliviana. Rodríguez inició su carrera en Independiente en 2008 y rápidamente se convirtió en una promesa del fútbol argentino. Tras su paso por Jorge Wilstermann, lleva cinco años en la región y se encuentra habilitado para ser convocado a la selección. En palabras del jugador: Por ahora estoy tranquilo haciendo mi trabajo, voy de a poco. El jugador fue parte del equipo que levantó la Copa Sudamericana en 2010 y tuvo destacadas actuaciones, siendo comparado con el Kun Agüero. Luego de pasar por Santos de Brasil y tener un breve paso por Estudiantes de La Plata, Rodríguez logró dar el salto a Europa en la temporada 2016/2017 con el AEK de Atenas. En Grecia disputó competencias como la Champions League y Europa League, ganando una copa local. Posteriormente, tuvo pasos por Portugal y Wilstermann antes de llegar al Bolivar, donde ha acumulado 137 partidos en primera división con 31 goles y 30 asistencias hasta la fecha. Fuente: Olé Deporte Internacional
La odisea de la selección de Bolivia en su regreso a La Paz llegó a su final este sábado por la tarde, cuando finalmente el plantel aterrizó en el Alto, luego de una escala en Santa Cruz de la Sierras. Una llegada que se demoró 12 horas más de lo previsto, por los contratiempos que sufrió la delegación boliviana en el aeropuerto de Maturín, Venezuela, cuando se disponía a emprender su regreso luego de la derrota 2-0 ante la selección local. Al momento de abordar al avión el plantel recibió la información de que no había ningún vuelo autorizado para despegar. A su vez, argumentaron que los escáneres de la terminal no funcionaban y que además había mucho tráfico aéreo. Así, ante la imposibilidad de partir, regresaron al hotel, donde pasaron una noche antes de poder finalmente emprender la vuelta. En su llegada a La Paz, Óscar Villegas, DT de Bolivia, fue contundente con respecto a lo que tuvo que vivir la selección en Venezuela y denunció que se trató de un secuestro. “Era algo que sabíamos. Días previos sabíamos que nos iba a pasar lo mismo que a Perú. Pero ya más de ocho horas, es prácticamente un secuestro. Ya pasa a otro ámbito. Eso dicen las leyes, a partir de las ocho horas. Nos retuvieron demasiado. Pero ya está, ahora vamos a recuperarnos y a ponernos bien para el partido, aseguró, en una conferencia improvisada con la prensa local. Además, con respecto a un posible reclamo ante Conmebol , explicó: “Eso verán las autoridades correspondientes, ellas tendrán que ver qué medidas asumir”. Con respecto a las complicaciones que generó esta inesperada demora, aseguró que los jugadores descansaron lo más posible, pero dentro de lo que se puede, porque por supuesto la incomodidad... hemos ido tarde al hotel. Y para cerrar, avisó: Este tipo de cosas nos tienen que hacer más fuertes para enfrentar a Chile”. Desde un primer momento, incluso todavía en Maturín, Villegas denunció que todo lo sucedido tuvo que ver con un complot preparado por la Federación Venezolana de fútbol para perjudicar a nuestro equipo. Ellos quieren ir al Mundial a toda costa y por lo mismo necesitan que nos vaya mal ante Chile. Por eso demoraron el viaje ya que de esa forma alteraban nuestra preparación y nos quitaban horas para reacomodarnos a la altura del alto después de haber jugado a nivel del mar. Este viernes, Venezuela recibió a Bolivia en el Estadio Monumental de Maturín, por el duelo correspondiente a la fecha 15 de las Eliminatorias Sudamericanas. La Vinotinto se impuso 2-0 y se quedó con los tres puntos en casa. Pero la polémica estalló en el post partido. Al momento de abordar al avión para regresar a Bolivia, la delegación visitante recibió la información de que no había ningún vuelo autorizado para despegar (autorización necesaria desde Caracas). A su vez, argumentaron que los escáneres de la terminal no funcionaban y que además había mucho tráfico aéreo. El staff de La Verde optó por volver al hotel a pasar la noche, para partir en la mañana del sábado. Dicho suceso despertó un sinfín de suspicacias, con la principal teoría de que el escenario se trataba de un sabotaje en contra de la selección boliviana, llevando así a que los futbolistas puedan descansar menos pensando en lo pareja que está la pelea entre la Vinotinto y el conjunto boliviano por conseguir el cupo de repechaje para la Copa del Mundo 2026. “Le pedimos al ministro de Gobierno, que se supone que es un gobierno amigo, que nos faciliten salir de Venezuela. Y bueno, está sucediendo lo que teníamos previsto, en todo caso. Lo hicieron con la línea aérea venezolana con Perú, elegimos otra, pero ven que no respetan ni siquiera otra línea aérea que es del exterior”, denunció Óscar Villegas, DT de Bolivia. Mientras Harold Howard, jefe de seguridad de la FBF., manifestó: “Nos tienen secuestrados en Venezuela. Esto es un sabotaje hacia la selección boliviana. Alegan tráfico aéreo cuando apenas había dos aviones volando. No se si habrá una mala intención o qué”. Desde la Federación Boliviana afirmaron que la intención es que haya una resolución a nivel gobiernos y también Conmebol fue notificada del suceso para tomar cartas en el asunto como corresponda. Finalmente, el avión partió casi al mediodía del sábado y aterrizó cerca de las 16 horas en Santa Cruz para luego tomar otro vuelo a La Paz donde los jugadores permanecerán concentrados esperando el duelo con Chile el próximo martes. Venezuela ocupa el séptimo lugar con 18 puntos y Bolivia está en el octavo puesto con 14 puntos. Perú empató este viernes con Colombia y llegó a 11 puntos superando y dejando último a Chile con 10 puntos tras caer ante Argentina. El martes Chile podría quedar matemáticamente fuera del Repechaje. Estará obligado a ganarle a Bolivia y rezar para que Venezuela no sume en su choque contra Uruguay. Luego en septiembre le quedará jugar ante Brasil como visitante y con Uruguay en casa en el cierre de las Eliminatorias. A su vez Perú está en una situación similar con apenas un punto más que La Roja dirigida por Óscar Ibáñez quien tiene ganar todo y esperar resultados. Fuente: Olé Deporte Internacional
En un partido que significó otra derrota en los penales para River, la octava de manera consecutiva, y un triunfo histórico para Platense por 4-2 (1-1 en tiempo regular), los focos de aquellos cuartos de final del Torneo Apertura se centraron en el árbitro, Yael Falcón Pérez, por su seguidilla de errores en el cierre del partido que perjudicaron al Calamar. De hecho, no volvió a ser designado en otro encuentro hasta que este miércoles, 15 días después, la Conmebol anunció que será el juez principal de Venezuela-Bolivia, por la fecha 15 de las Eliminatorias. Falcón Pérez, uno de los dos árbitros principales argentinos que irán al Mundial de Clubes, encabezará el próximo viernes en Maturín una terna arbitral completamente albiceleste para un partido clave. A él lo acompañarán Maximiliano del Yesso como asistente 1; Facundo Rodríguez como asistente 2; Leandro Rey Hilfer como cuarto árbitro; Jorge Baliño como el encargado del VAR y Germán Delfino como AVAR. En ese encuentro, con cuatro jornadas restantes para el fin de estas Eliminatorias, Venezuela y Bolivia, distanciadas por apenas un punto, juegan un duelo trascendental en búsqueda de clasificar al Mundial 2026: la Vinotinto se encuentra séptima con 15 unidades y posee, en este momento, el cupo de repechaje, mientras que la Verde, octava con 14, se encuentra fuera de los puestos de clasificación. Un triunfo para Bolivia significará alcanzar ese cupo de repechaje y para Venezuela, en consecuencia, supondrá protegerlo y aspirar, incluso, a los puestos de clasificación directa: su rival más próximo es Colombia, que se ubica en el sexto lugar con 20 unidades. En ese marco dirigirá Falcón Pérez, cuestionado tras aquel mata-mata por los futbolistas de Platense, por ex colegas como Javier Castrilli y por el propio Fernando Rapallini, Gerente Técnico de Arbitraje de la AFA, quien, en diálogo con Olé, calificó como una muy mala conducción su trabajo en ese cruce. Las decisiones que tomó Falcón Pérez y que perjudicaron a Platense tuvieron lugar todas en el final del partido. Sobresalen no mostrarle ninguna tarjeta a Marcos Acuña, defensor de River, tras un planchazo a Fernando Juárez (merecía al menos una segunda amarilla y ser expulsado); y cobrar un lateral a favor del Millonario que era en realidad para el Calamar y que les permitió a los de Marcelo Gallardo construir la jugada que terminó en el penal (bien sancionado) con el que los locales empataron el partido. Ni siquiera el VAR llamó a Falcón Pérez para revisar el planchazo de Acuña por una posible roja directa que es, de hecho, la decisión que tendría que haber tomado el árbitro según le dijo Rapallini a Olé. Y en el lateral a favor de River, la pelota tras una disputa entre Lucas Martínez Quarta y Franco Zapiola había rebotado en el defensor del Millonario. Por lo tanto, el lateral correspondía para los de Vicente López. No lo observó eso Falcón Pérez ni tampoco el asistente 1 Yamil Bonfá ni el cuarto árbitro Sebastián Martínez. A eso hay que sumarle que todas esas situaciones se dieron en el marco de un adicional de 6’ que luego Falcón Pérez amplió a 9’. A su favor, el penal está bien cobrado y dar tanto descuento es inusual pero adecuado a lo que había pasado. Platense demoró todo lo que pudo; hubo atenciones en cancha; ceremonias antes de cada tiro libre. Cuando anuncia 6’ más hasta es poco y resulta que hay un jugador en el piso que impide reanudar hasta que pasa ya casi la mitad de esa adición; está bien que se agregaran otros 3’ aunque la costumbre ha naturalizado que se premien las demoras y que los árbitros se laven las manos. Hay también un fortísimo choque entre Franco Mastantuono con Juárez en el cual Mastantuono se ataja con el brazo hacia adelante y golpea al rival; luego Falcón Pérez sigue el partido con Juárez en el piso incluso desviándose del juego para interceder entre Mastantuono y Juárez. Sobre el jugador caído;el árbitro no vio falta en el topetazo entre Mastantuono y Juárez y pudo interpretar que el de Platense se quedaba en el suelo para estirar minutos como habían hecho muchos de sus compañeros; más aún cuando en la continuidad del juego Platense recuperó la pelota y no la tiró afuera ni le pidió atención al árbitro sino continuó el ataque que terminaría justamente en el polémico lateral. Ahí sí antes de que River repusiera la pelota hizo atender a Juárez. Fuente: Olé Deporte Internacional