Lucas Gatti vuelve como DT al Olbia de la Serie D italiana
El mundo del fútbol se vio impactado en abril por la partida del legendario arquero argentino Hugo Orlando Gatti. Sin embargo, semanas después, una buena noticia llega para uno de sus hijos, Lucas, ex futbolista que ahora da un paso importante en su carrera en el deporte rey. Se ha confirmado que regresará al Olbia, equipo de la Serie D de Italia, como director técnico, tras haber dejado el cargo en noviembre pasado debido a la salud de su padre.
"Acabamos de tener la presentación como entrenador del primer equipo. Así que, nada, muy contento. Un club que está creciendo mucho desde todos los puntos de vista", expresó Lucas, quien había dirigido solo seis partidos en el Olbia el año pasado (una victoria, dos empates y tres derrotas) antes de apartarse para cuidar a su padre.
"Está en un lugar increíble, en la Serie D italiana. Y, nada, empezar acá ahora dentro de 20 días, la pretemporada, y con todas las ganas de empujar al equipo a la Serie C, que es lo que queremos todos", continuó el hijo del Loco.
"Yo ahora mismo estoy con un problema con la licencia de UEFA para poder dirigir en el nivel más alto, y ahora puedo dirigir Series D y C. Y, bueno, surgió esta posibilidad y ya estuve el año pasado acá. Conozco a la gente del club y, la verdad, que es una experiencia muy linda, una oportunidad muy grande. Y, bueno, nada, a empezar ahora a intentar ayudar a estos chicos a que puedan conseguir el objetivo de ascender de categoría", comentó el flamante entrenador.
Lucas también se disculpó por haber tenido que dejar el equipo anteriormente: "Estoy muy contento de volver tras un año muy difícil a nivel personal. Y quiero disculparme una vez más con todos por haber tenido que dejar el Olbia y el equipo el pasado noviembre, pero lamentablemente la situación familiar no me lo permitió."
"Sí, la verdad fue un año... Todo empezó con la muerte de mi vieja en junio del año pasado. El Loco pensábamos que por ahí iba a estar mejor, pero había ido entrando en una debacle, sobre todo a nivel emotivo; yo estaba acá en Olbia justamente en ese periodo", comentó Lucas.
"El motivo por el cual tuve que renunciar e irme el año pasado fue porque quería traérmelo al Loco conmigo: a vivir con las chicas, para que se despeje. Lo veíamos que estaba cada vez más para abajo, y no quiso saber nada. En febrero entró en el hospital y en abril falleció; pero las repercusiones fueron increíbles, todo lo que nos deja es increíble", recordó su hijo con cariño.
"En cada cosa que haré hay un pedazo de él siempre, porque yo soy hijo de su forma de ver las cosas; así que ¿qué te puedo decir? Muy triste porque se hizo también muy largo, porque fue un poco sufrido. Se puede entender que un padre se vaya con 80 años: si es repentino es una cosa; si todo se hace tan largo y doloroso es otra", lamentó Lucas.
Sin embargo, Lucas reconoció los buenos recuerdos y sigue adelante: "Es lo que fue; lo aceptamos; nos quedamos con lo mejor; con el recuerdo; con todas las enseñanzas; la posibilidad de haber podido vivir con un tipo tan especial. Y ahora nada; a recoger la bandera que nos deja y seguir para adelante; eso es lo que tenemos que hacer".
"Yo estuve en el Bernabéu (para el homenaje al Loco), fui con mis cuatro hijos y con mi mujer; fuimos ahí con Florentino (Pérez), que nos invitó y tuvo ese detalle que nos ha emocionado muchísimo. Hemos visto un respeto increíble por parte de todos; podemos decir que fue un cierre increíble para todo este periodo que fue un poco duro", comentó Lucas.
"Yo algún día voy a dirigir a Boca, seguro. Ahora mismo estoy muy pendiente de mis licencias de entrenador acá [...] pero como tengo un problema con las licencias llevo cuatro o cinco años que no puedo dirigir al máximo nivel. Pero sí tengo la licencia de Latinoamérica; y una de las posibilidades es que dentro de no mucho tiempo me vaya para allá", comentó también el hijo del Loco.
"Y Boca obviamente: yo sé que algún día no sé cómo no sé cuándo pero yo voy a dirigir a Boca seguro. Es un sueño. Boca es sentido de pertenencia: yo me crié en la cancha de Boca; me crié desde muy chiquito con Raulito; mi papá me llevaba todos los días a entrenamiento; yo viví ahí después como jugador tres años lo viví", relató quien supo vestir los colores azul y oro entre 1997 y 1999.