Conmebol inventó Copa Centenario para Argentina, pero Chile fue bicampeón
Un día como hoy, el 26 de junio de 2016, la selección chilena logró una victoria histórica al derrotar nuevamente por penales a Argentina y consagrarse bicampeona continental al ganar la Copa América Centenario en el MetLife Stadium de Nueva Jersey.
La Roja, dirigida por Jorge Sampaoli en la Copa América 2015 y por Juan Antonio Pizzi en esta ocasión, logró repetir el título un año después. Aunque no jugó la segunda final contra Argentina, uno de los jugadores clave en ambos torneos fue Mauricio Pinilla.
En una entrevista con Deportes en Agricultura, el exdelantero recordó con orgullo y emoción aquel día en Estados Unidos, ofreciendo un análisis crítico hacia la Conmebol y la selección argentina. Pinilla expresó: “¿Qué estaba haciendo hace nueve años? Festejando la obtención de esa Copa Centenario 2016, una experiencia hermosa. La verdad es que íbamos con pocas expectativas, veníamos recién celebrando la copa del 2015, como que no teníamos muchas ganas de volver a competir…”.
El comentarista de 41 años añadió: “Teníamos ese vuelito del formato futbolístico que veníamos aplicando y de repente se empezó a dar. Íbamos a puros saltito hasta que se dio la obtención de la copa, que fue una maravilla”.
En cuanto al partido final, Pinilla explicó: “Cuando llega la final nosotros sabíamos que íbamos a ganar. Argentina venía con toda la presión emocional de perder el Mundial, de perder la Copa América, y nosotros sabíamos que mentalmente estábamos mejor preparados que los argentinos”.
“Para nosotros esta Copa América 2016 era como un caramelo para dárselo a Argentina, pero nosotros dijimos: ‘llegamos hasta acá, estamos listos. Hay que arrebatarle la alegría a Argentina’. Habían inventado un trofeo para dárselo a Argentina y lamentablemente para ellos nos pillaron bien emocional y físicamente. Fue un partidazo”, afirmó desafiante el otrora acrobático goleador nacional.
Por último, Mauricio Pinilla concluyó diciendo: “Se comenta mucho que los jugadores hablamos con el entrenador para cambiar la forma de jugar, pero se dio de forma natural jugar como antes. Esa selección jugaba a la perfección y había poco que mover”.