Bayern Munich cambia sponsor de Ruanda por críticas internacionales
El Bayern Munich ha tomado la decisión de modificar su controvertido acuerdo comercial con Ruanda, cambiando su patrocinio con “Visit Rwanda”, la marca turística del país africano. Esta medida se da en medio de una intensa presión internacional y críticas debido al presunto respaldo del gobierno ruandés al grupo rebelde M23, que opera en el este del Congo.
El club alemán, que había firmado un contrato de cinco años en 2023, ha anunciado que transformará esta asociación en un programa de desarrollo juvenil enfocado en su academia en Kigali. Según el CEO Jan-Christian Dreesen, el objetivo es orientar la relación hacia un proyecto tanto deportivo como social.
Esta decisión llega poco después de que la República Democrática del Congo (RDC) instara públicamente a Bayern, Arsenal y Paris Saint Germain (todos patrocinados por “Visit Rwanda”) a romper sus lazos con la marca. La ministra de Asuntos Exteriores congoleña, Thérèse Kayikwamba Wagner, envió cartas a los tres clubes calificando al patrocinio como “manchado de sangre” y apelando a su conciencia.
"Vuestro patrocinador es directamente responsable de esta miseria. Si no es por vuestras propias conciencias, deberían hacerlo por las víctimas de la agresión ruandesa", expresó Wagner, citando un informe de la ONU que señala la presencia de 4.000 tropas ruandesas en territorio congoleño.
La asociación de “Visit Rwanda” con el fútbol europeo comenzó en 2018 con el Arsenal, en un acuerdo que supera los 10 millones de libras anuales. Posteriormente se sumaron el PSG en 2019 y el Atlético de Madrid en 2024, además del Bayern, con diferentes niveles de visibilidad en camisetas, estadios y plataformas digitales.
El Ministerio de Salud de la RDC informó que tras un ataque del M23 en Goma (una ciudad clave del este del Congo rica en minerales), casi 800 cuerpos fueron hallados en las morgues locales.
Naciones Unidas también denunció una escalada de violencia, con ejecuciones, bombardeos a campamentos de desplazados y una crisis humanitaria que obligó a cientos de miles de personas a abandonar sus hogares.
Por su parte, Ruanda niega cualquier vinculación con el grupo rebelde y afirma actuar en legítima defensa, acusando al ejército congoleño de aliarse con milicias responsables del genocidio ocurrido en 1994.
Fuente: Olé Deporte Internacional