El especial reencuentro de Riquelme en Perú con un ex Boca
Román y Ñol se juntaron en la previa al choque entre el Xeneize y Alianza Lima por la ida de la fase 2 de la Libertadores: nostalgia, amistad y un regalo especial.
Boca aterrizó en Lima con la cabeza puesta en la Copa Libertadores, pero Juan Román Riquelme se tomó un rato para un reencuentro especial. En la previa del duelo con Alianza Lima por la ida de la fase 2 del certamen continental, el presidente Xeneize se cruzó con un viejo amigo con el cual compartió vestuario en el club de la Ribera: Nolberto Solano.Y el Maestrito, histórico volante peruano, no tardó en compartir el momento en sus redes. “Lindo encuentro con amigos, gracias Román. Gran reencuentro”, escribió en Instagram, acompañado de una imagen en la que se lo ve sosteniendo la camiseta número 10 de Boca que le regaló JR.Fue un gesto de esos que valen más que mil palabras. Porque Nolberto Solano, más allá de haber jugado apenas un año en Boca, dejó su huella. Su pegada quirúrgica lo convirtió en un arma letal en la pelota parada. Riquelme, quien lo tuvo de compañero entre 1997 y 1998, lo recuerda con cariño y lo dejó claro con este homenaje inesperado.La historia de Solano con Boca no es de las más largas, pero sí de las más recordadas. Llegó en 1997 y en apenas 49 partidos logró enamorar a la hinchada con su calidad y precisión. Siete goles con la azul y oro, todos con su sello, antes de que el Newcastle lo fichara en 1998 para llevarlo a la Premier League.En Boca, jugó al lado de nombres pesados como Diego Maradona, Claudio Caniggia y, claro, Juan Román Riquelme. Fue clave en la Supercopa 1997 y dejó su huella en el Apertura y el Clausura de aquellos años. Luego, en Inglaterra, se transformó en un referente del Newcastle y también pasó por Aston Villa, West Ham y Leicester, siempre con su estilo elegante y su pegada quirúrgica.Ñol, como así lo apodan, sigue de cerca la actualidad Xeneize y en una entrevista con DSports analizó el presente de su compatriota, Luis Advíncula: “Con ‘Luchito’, después del proceso que nos tocó vivir en la selección, no he tenido la oportunidad de hablar. Creo que el más claro de todo esto es él, porque sabe de la exigencia que es Boca. Es un club que te va a exigir hasta el final. Él lo sabe, es un club grande que tiene que ganar siempre”, comentó.Advíncula tuvo altibajos en su ciclo en Boca y Solano lo sabe: “Ha tenido momentos buenos, momentos malos y tiene la experiencia suficiente para que estos momentos difíciles, que está jugando para ganarse de nuevo el puesto en el equipo. Eso es Boca”, agregó.Por lo pronto, el Rayo no estará en la ida contra Alianza Lima, ya que arrastra una suspensión desde la Copa Sudamericana. Su lugar lo ocupará Juan Barinaga.El ex delantero, que sabe lo que es jugar en la Bombonera y también en el Alejandro Villanueva, analizó el duelo: “Va a estar bravo, va a ser difícil. Es un Boca que está acostumbrado a este tipo de torneos. Boca no piensa en esta etapa, piensa en quedarse, entrar en la Copa Libertadores y quedarse hasta el final. Esa es la exigencia de lo que es Boca”, explicó.A su vez, fue claro sobre la actualidad del equipo de Fernando Gago: “Va a ser muy duro para Alianza, pero bueno, es un partido que no lo agarra en un buen momento a Boca y eso le da un poco de aliento a Alianza Lima para intentar superar esta serie”.Mientras tanto, Boca ya está en Lima y Riquelme, entre charlas y abrazos con viejos amigos, espera que el equipo responda en la cancha. En su última visita a Perú, dejó una camiseta de regalo. Ahora quiere que el equipo le deje tres puntos.
